La afición volvió a tender la mano al tenis durante el Sony Ericsson Championships
Madrid, 14 noviembre. El Sony Ericsson Championships cerró el pasado domingo su primera edición en Madrid con el sabor del deber cumplido, del éxito. Con el recuerdo de la respuesta de una afición que, como en las grandes citas con el tenis, no falló y se convirtió en uno de sus principales activos.
Madrid repitió la fórmula que ya exhibió en cinco años del Mutua Madrileña Masters Madrid. El mejor tenis del mundo, unas instalaciones admirables, una amplia oferta de ocio y fuertes patrocinadores que le respaldaban. En esta ocasión los hombres dejaban el protagonismo a las mujeres, aunque no cambió la receta del éxito.
Lo demostró la afición, uno de sus principales activos. Desde las primeras jornadas quedaron despejadas las respuestas de la misma. El Recinto Ferial Casa Campo contó siempre con entradas próximas a los 9.000 espectadores, una barrera que se superó el sábado, el día donde estaban programadas las semifinales.
En total fueron 54.093 los espectadores que acudieron al Sony Ericsson Championships durante los 6 días del torneo. Una cantidad muy similar a la registrada esta temporada en el Mutua Madrileña Masters Madrid, torneo donde existía la opción de la doble sesión en cada jornada.
También los números de la audiencia televisiva fueron muy similares. El tenis centró durante la pasada semana la atención de los telespectadores. Fue la semifinal protagonizada entre Clijsters y Mauresmo la más seguida con un share del 6,5 por ciento, superior a la media que registró La2 durante toda esa jornada.
Unos datos que no han hecho más que reafirmar la apuesta de Madrid por el tenis femenino y que hicieron que la WTA se decantase por la capital española para repetir experiencia en 2007.
El Recinto Ferial Casa de Campo acogerá el Sony Ericsson Championships y da un paso más en su proyecto de contar con un torneo combinado a partir de 2009. Y es que la afición, por encima de nombres y tenistas locales, ha demostrado en este torneo su madurez, su apuesta por el mejor tenis